La civilización del horror.
El relato de terror en el Perú*
Dra. Roxana Guadalupe
Herrera Alvarez
Universidad Estadual Paulista
– Brasil
Es importante que se diga
que la lectura ha sido llevada a cabo por alguien que suma a su condición de
investigadora de teorías y obras de la literatura fantástica, la de extranjera.
Y esta última hace sobresalir un aspecto importante del libro: el de abrir las
páginas de la literatura peruana del fantástico y del terror de la mano de
quien se revela un profundo y crítico observador.
Comenzaré destacando la
acertada organización de la obra. El primer capítulo constituye una bien
documentada visión crítica en la cual se destaca, según mi perspectiva, la
intención de distinguir el relato de terror de la literatura fantástica, aunque
no se muestre una tarea fácil, dado que, según el bien expuesto recorrido por
una serie de obras y autores según una perspectiva temporal, ambas formas
parecen estar, en algunas obras, bastante conectadas. Asimismo destaco del
primer capítulo la caracterización, apoyada en escritores y críticos, del
miedo, el horror (como algo físico, sensorial, visceral) y el terror (la
concreta realización de los peores miedos). También resulta muy esclarecedora
la diferencia entre el miedo y la angustia, que es más difusa y sin nexo
explícito con algo que la provoque en particular. Esa distinción, de la manera
como Elton Honores la presenta, funciona como un camino de reflexión que se le
ofrece a los investigadores de la literatura fantástica, como es mi caso. Se
trata de una bien fundamentada distinción, muy necesaria para comprender los
mecanismos que ponen en marcha los relatos de terror y los fantásticos.
Resalto una característica
propuesta por Elton a partir de su visión crítica, la cual le da fundamento al
relato de terror: evocar en el lector, por medio de la composición literaria,
el miedo instintivo a la muerte, principalmente cuando la muerte se conecta a
la violencia, al dolor y al horror. Confieso que mientras leía pasé revista a
mis miedos más atroces y entonces comprendí los alcances de un relato de
terror. Por medio de esas sensaciones me parece haber encontrado, gracias a la
lectura de las reflexiones de Elton, un punto importante con respecto al relato
fantástico: su propósito es llevarnos a cuestionar los límites de lo que
consideramos lo real. Y ese cuestionamiento puede provocar en el lector una
profunda inquietud e insatisfacción. Quizá se trate de una sensación localizada
en la esfera intelectual. Ya el terror, como bien observa Elton, nos exige que
participemos con nuestra sensorialidad. Con respecto a la evocación de esos
miedos, queda claro que el goce estético tiene que ver, por lo menos en parte,
con la seguridad y amparo que proporciona el ambiente de lectura (o de
exhibición de una película de terror, si fuera el caso). También se destaca el
carácter de literatura de masa o comercial que se le da a mucha de la
producción de relatos de terror. Sin embargo, entiendo que uno de los objetivos
del libro de Elton es valorar la literatura de terror y encontrarle su sitio en
el marco de los estudios literarios.
Otro aspecto que destaco en
la organización del libro son los capítulos dedicados a mostrar al lector las
facetas de la rica y compleja literatura de terror peruana. La descripción de
los tres horizontes marcados por influencias (Poe, Lovecraft, la globalización,
destacando a autores como Stephen King) nos da la medida de un pensamiento
conectado con una visión amplia del fenómeno literario que estudia, buscando
insertarlo críticamente en la historia de la literatura. También destaco la
importancia que se le da a la rica tradición oral peruana como material
singular que se utiliza en la construcción de relatos de terror.
Como extranjera que soy,
afirmo que el libro me ha abierto nuevas perspectivas de lectura y me ha movido
a acercarme a los autores y obras enfocados. Destaco la importancia de este
libro profundo, crítico, reflexivo, agudo, producto de un joven investigador de
mente brillante e inquisitiva.
*Texto de presentación. Lima,
Jueves 23 de octubre de 2014, I Congreso Internacional de Narrativa Fantástica,
CELACP.